El otro día os comentaba esa rara especie animal y antes de nada quería aclarar que cualquier semejanza con hechos o personas de este post son pura coincidencia.... :)
Sigamos haciendo esta extensa clasificación,
Dijimos los hombres sinceros, los memolos, los macarras, los Forrest...y donde dejamos a los "fresones".
Esos chicos que me combinan esas camisitas de spagnolo con ese pantalón chino en rosita, celestito, verde y rojo!! ..ay dios...rojo....!!!!Esas americanas y esos náuticos que por favor no tengo nada en contra de ustedes los fresones pero tienen ese estilo peculiar de hablar, de mirar a una chica de relacionarse en ese club tan selecto de amigos, con frequillos infinitos hacia un lado.
Mis amigas me dicen que al final acabare con un fresón y yo digo que no sé que me vendrá en la vida, pero pa ti y pa mi....ese estilo fresón se podría ir matizando con los años no???...jajajajaa porque lo que es a mi...ni mijita!!!
Los príncipes azules, esos hombres que yo creo que ninguna conocemos, es un sector bastante idolatrado de la sociedad por todas las mujeres pero que en realidad creo que muy poquitas tienen el placer de tener uno en su brazos.
A lo sumo lo más azul que estuvo entre mis brazos fueron pitufos azules y al final acabaron desteñiendo, así que poco puedo hablar de este tipo de hombre, aunque en realidad me pregunto..
¿ existen los príncipes azules o solo son reales en los cuentos de hadas?
Luego yo tengo clasificado uno particular " el chico mini " y no lo digo de pequeñito por su estatura que para mí esos son los bonsáis...es mi chico mini sin más.
Ese chico que me robó por un día el corazón.
Miradas cuando os cruzáis con el coche y de repente un día te lo encuentras en el supermercado, haces que se fije en ti..jajaja porque yo tuve que hacer que se fijará en mí y surge ese flechazo de los que te arrancan una sonrisa al recordar.
Y un día sin más lo ves y te lanzas a hablar con él y cual es tu sorpresa que el te recuerda perfectamente al igual que tu a él, reímos, bebimos, bailamos, hablamos y después de una noche un poco rara y distinta, se fue y dijimos pues quizás en otra ocasión..volveremos a vernos...tal vez...quién sabe...mi hombre mini ¿ donde estás ?...jajaja un chico guapisimo y encantador, son esos hombres flechazos que se cruzan en tu camino pero cada uno seguís un rumbo.
Luego como no, los hombres casados, tu mayor enemigo.Ese hombre que si es capaz de enamorarse de ti en dos semanas, de decirte que es capaz de dejarlo todo por ti, su mujer, sus hijos, que te regala flores y te regala los oídos, no te engañes..Quieren una aventura porque su matrimonio esta en la fase aburrida y solo quieren sexo y en el momento que tu dices NO, estas loca, sigues tocada por tu anterior relación o ¿eres demasiado para él ?...perdona bonito.. ahora le digo a todos esos casaditos: si queréis un polvo se lo hecháis a vuestra mujer y si queréis algo más..primero actuar como tal, hombres que hacen las cosas bien, no se lamentan poniendo de excusa a sus hijos y demostrando con hechos no con palabras que se las lleva el viento.Y cuando decides no entrar en ese circulo vicioso acaban volviendo a las faldas de su mujer, con el rabito entre las piernas, porque no lo pudieron meter en otro sitio.
Si engaña a su mujer e hijos ¿ porque no te puede engañar a ti ?
Los "bien queda" esos hombres que son como lobos, que quieren tapar su antihéroe mercenario, con una impresión de chico cordial, educado pero que tarde o temprano acaban delatandose a si mismos con su actos y cacerías y solo buscan con su sentido del olfalto el aparentar lo que en realidad no son, son hombres que intentan embaucar a las mujeres con sutiles movimientos y no solo a las mujere sino a todo el mundo.
Su egocentrismo hacia si mismos es su centro de Universo y acaban delatandose con el tiempo en hombres cobardes, pusilánimes y faltos de hombría. Porque no entendeis, que las mujeres no queremos hombres que nos regalen los oidos, que nos compren con regalos caros.
Prefiero miles de regalos de papel y una mirada que me transmita confianza, una sonrisa y una caricia a toda una declaración de intenciones engañosa que hiera mi corazón.
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